UN DILEMA DE IDENTIDAD AL PROGRESAR EN LA EMPRESA. YOGUR CON TROCITOS

¿Cómo progresar en la empresa? Tengo clientes que consiguen ese puesto de trabajo que tanto tiempo llevan buscando, y una vez lo han logrado ésa es la siguiente pregunta. Y no es sencilla.

Hoy te pido que leas el texto con atención. Es fácilmente malinterpretable y en algunos puntos políticamente incorrecto, así que espero explicarme lo suficientemente bien como para que se entienda en sus matices.

A veces es difícil escribir estos textos, ya que en lo que yo hago existen muy pocas recetas. Hay criterios, maneras de actuar, herramientas, pero en cada caso se aplican de una manera diferente.

Es lo mejor de trabajar con personas. Cada proceso es una aventura.

Y otra cosa: como el post está lleno de adjetivos y participios que requieren dirigirse a un género determinado, esta vez lo voy a escribir pensando en ti, lectora. Con las terminaciones en femenino, como hacía Gonzalo García Muñoz en sus interesantes artículos.

Así que, ¿cómo progresar en la empresa hoy en día? ¿Vale la pena hacerlo si para ello hay que pasar por muchos aros?

Progresar en la empresa

Diferentes pero diluidas

Siempre digo, y lo habrás oído mucho, que debes buscar aquello que te hace única, lo que tú puedes ofrecer y nadie más puede y que resulta útil para el mercado, laboral en este caso.

En un proceso de búsqueda de empleo contigo encontraremos siempre una propuesta de valor personal, que condensará ese beneficio diferencial que puedes ofrecer. Combinada con tus valores y tu propósito vital, formarán una huella única, un genoma irrepetible.

Sin embargo, en estos temas siempre se nos habla de referentes. Fíjate en Jeff Bezos, vaya con lo que ha conseguido el CEO de nosequé S.L., qué pasada lo del último unicornio… Y se nos impulsa a ser como ellos.

Está bien tener referentes y observar qué han hecho bien (y también qué han hecho mal, no son dioses). Ahora bien, ¿puedes ser tú como ellos? ¿Crees que tu genoma es como el suyo, y que por ello podrás copiar su éxito? ¿Eres una replicante?

¿Acaso tienes el genoma de tus referentes? ¿Quieres ser una replicante? #coaching #arquitectura Clic para tuitear

Lo mismo ocurre cuando nos planteamos progresar en la empresa.

Tienes una propuesta de valor y unos valores alineados con la organización, y gracias a ello te han elegido. Pero luego, con la excusa de integrarte en la cultura de empresa, se te exige estar cortada por un patrón determinado.

Si no lo estás, no progresas, y al final te toca diluirte en la empresa. Como un mango en un yogur de macedonia.

Hace poco me comentaban que los directivos y mandos intermedios de las organizaciones de cierta dimensión son todos iguales. No es cierto, pero sí que hay algo de ello, estereotipos frecuentes. Diría más, también entre l犀利士
os no directivos. Obviamente no en el 100% de los casos, claro.

Creo que esto es una tragedia.

Con trocitos

Te puedo asegurar que todavía no me he encontrado en mi actividad a dos personas iguales o a alguien que no tuviese algo interesante que ofrecer. A veces esa diferencia estaba escondida por cualquier razón (miedo, bajo nivel de consciencia…), pero acabó saliendo.

Da muchísima pena que consigas un puesto en una empresa por ser diferente, por tener una propuesta realmente única, y luego diluirte en el magma.

Una cosa es entender y absorber la cultura de empresa, y otra perder la identidad. Pero a veces pasa, hay una especie de síndrome de Estocolmo con la organización que tan bien se ha portado contigo contratándote.

Por otro lado, el día que quieras o tengas que volar, ¿dónde estará tu identidad? ¿Y tu marca personal?

Tú no eres tu puesto de trabajo. Debes entender y compartir la cultura de empresa, trabajar en ese marco, utilizar lo que te hace diferente para beneficiar a tu organización, pero sin perder tu esencia. Sin perjudicarte, sin ir en contra de tus valores, sin diluirte.

Aunque formes parte de ese yogur, sigue siendo un trozo de fruta. Mantén tu individualidad, que sea un yogur con trocitos.

Mantén tu singularidad dentro de la empresa. Sé un tropezón en el yogur #coaching #arquitectura Clic para tuitear

¿Realmente quieres ser como todos esos que supuestamente van a progresar en la empresa por cumplir el patrón? ¿Quieres replicar a todos esos directivos de éxito?

En tiempos en los que las organizaciones empiezan (o deberían empezar) a valorar la importancia de la marca personal de cada uno de los suyos por la repercusión que tiene sobre la empresa misma, ¿qué sentido tiene estar obligado a homogeneizarse para poder hacer carrera?

Progresar en la empresa evitando los tópicos

Huye de los tópicos. Las cosas en el mundo empresarial están cambiando poco a poco, y los viejos mantras y leyendas urbanas ya no tienen sentido ahora mismo.

He oído en algunas ocasiones, por ejemplo, incluso en escuelas de negocios, que las personas con gran empatía y que valoran los pensamientos y emociones de los demás tendrán problemas para ser buenos líderes. Como muestra, no van a poder negociar con agresividad, y la negociación es una competencia imprescindible para un líder.

¿Estamos todos locos? Te puedo asegurar que se puede liderar teniendo en cuenta las necesidades, emociones y miedos de los demás. Es más, es una buena cualidad.

Y hablando de negociaciones, ¿cómo las enfocas tú? ¿Crees que tienen que ser siempre un choque de trenes en el que debes arrasar a la otra parte? ¿No es acaso posible buscar otro modo de negociar, creando valor y llegando a soluciones satisfactorias para todas?

A veces sí, y a veces no, claro. Y no lo sabrás si no has desarrollado, entre otras cosas, tu empatía.

Y así.

Cómo ser un trozo de fruta que dé sabor al yogur

Te puede parecer más fácil ponerte el uniforme de la masa y pasar por el aro, pero eso es pan para hoy y hambre para mañana.

Para mantener tu individualidad y ser capaz de progresar en la empresa:

  • Conócete muy bien. Reconoce y asume tus limitaciones, mejora las que puedas. Céntrate en potenciar tus puntos fuertes, progresa cada día, adáptate a las necesidades del mercado sin cambiar tu esencia.
  • Mantén esa esencia, pero la parte buena. Ojo con lo de “sé tu misma”. Está bien serlo, por ahí van los tiros, pero siempre que te conozcas muy bien. Si eres una sociópata inaguantable, más que ser tú misma deberás buscarle un remedio a la situación, ¿no?
  • Eso que tanto repetimos de “sé tu mejor versión” es una bonita expresión, pero me empieza a causar incomodidad porque se usa a la ligera, como pasa con otras muchas. Se está convirtiendo poco a poco en “sé ESTA versión”. Si no eres de esta determinada manera, te comportas así, vistes de este modo, etc., no eres de los nuestros. Evítalo.
  • Mejora. En el universo Gran Hermano en que vivimos se oye habitualmente: “Es que Fulgencio es así, o lo tomas o lo dejas”. Pues no. Eso quiere decir que Fulgencio es así y además no tiene ningunas ganas de mejorar, porque eso da pereza y asusta. No hagas tú lo mismo.
  • Si has elegido bien, compartirás valores y propósito con la empresa. Disfruta de ellos, no te desvíes y que las situaciones de ganancia inmediata no te impidan ver el perjuicio futuro que te pueden ocasionar.
  • Cuida tu marca personal. Dedica algo de tiempo a potenciarla. Estás en una organización, pero sigues siendo una persona. Si la empresa sabe lo que hace, te ayudará.

El win-win

Bueno, el post ha quedado un poco protestón.

Ojo, no me estoy posicionando a favor de las personas y en contra de las empresas (de hecho, las empresas al fin y al cabo son personas). Simplemente digo que deberíamos estar hablando de situaciones en la que ambos ganaran, y eso desgraciadamente no siempre es así.

Dando lo mejor de ti vas a beneficiarte y también beneficiarás a tu empresa, y eso es un win-win clarísimo. Pero desde tu singularidad, sin perder lo que te hace valiosa. Y por supuesto, alineando tus objetivos con los de la organización.

La relación de la empresa con sus profesionales debería ser un win-win #coaching #arquitectura Clic para tuitear

Recuerda que tu mejor activo eres tú misma, que tienes cosas que ofrecer, que eres diferente y capaz de aportar valor, y que tu marca personal te precede allá donde vas. Y que fuera del paraguas corporativo, la vida sigue.

Si piensas integrarte en una empresa y trabajar allí toda tu vida, te equivocas. Esto ya casi no existe, así que te conviene ir forjando tu identidad profesional, posicionarte, y eso cuesta tiempo. Mantén siempre un ojo en tu futuro y no te diluyas.

Sé un trocito de fruta.

Tienes mucha más información, posts, recursos y herramientas para mejorar tu desempeño en la categoría DESARROLLO PERSONAL DEL ARQUITECTO.

¿Tienes problemas para progresar en la empresa? ¿Te has diluido en el paraguas corporativo y has dejado de existir? ¿Crees que vas bien en lo de no perder tu identidad?

Gracias por leerme. Que tengas un buen día.

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2 comentarios en «UN DILEMA DE IDENTIDAD AL PROGRESAR EN LA EMPRESA. YOGUR CON TROCITOS»

    • Hola, Amparo.

      Muchas gracias. 🙂

      Eres un buen ejemplo de marca personal constante incluso trabajando en ámbitos diferentes. Un gran acierto.

      Gracias por pasarte y por comentar.

      ¡Un abrazo!

      Responder

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